Guisantes con jamón
20 min
Ingredientes
500 g de guisantes (frescos o congelados)
1 cebolla (o 2 cebolletas)
2 dientes de ajo
80 g de jamón en dados o en lonchas finas
1 huevo XL
5 g de aceite de oliva virgen extra
Sal al gusto
Pimienta negra (opcional)
Preparación
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1
Si usamos guisantes congelados, los cocemos en abundante agua con sal durante 10 minutos, contando desde que el agua comienza a hervir.
Una vez cocidos, los escurrimos, los refrescamos con agua fría para cortar la cocción y los reservamos. -
2
Pelamos y cortamos la cebolla (o las cebolletas) en juliana, es decir, en tiras finas.
Picamos también los dientes de ajo. Si usamos jamón en lonchas, lo cortamos del mismo modo, en tiras finas. -
3
En una cazuela grande o sartén amplia, añadimos un chorrito de aceite de oliva virgen extra y calentamos a fuego medio.
Rehogamos la cebolla y el ajo hasta que estén bien pochados.
Incorporamos el jamón y lo salteamos durante un minuto más, sin dejar que se seque demasiado. -
4
Incorporamos los guisantes que teníamos reservados y los mezclamos con cuidado, usando una cuchara de madera para no romperlos.
Rectificamos de sal y, si nos apetece, añadimos un poco de pimienta negra al gusto. Ojo con la sal, ya que el jamón ya aporta bastante sabor. -
5
En una sartén aparte, freímos el huevo a nuestro gusto (también podemos hacerlo poché o escalfado si preferimos una opción más ligera).
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6
Servimos los guisantes calientes en un plato, coronados con el huevo.
Es un plato sencillo, sabroso y muy vistoso, perfecto para una comida ligera pero nutritiva.