¿Qué son los termogénicos?

Los termogénicos son suplementos o compuestos naturales diseñados para aumentar la temperatura corporal y, como resultado, acelerar el metabolismo. Su nombre proviene del término “termogénesis”, que significa la producción de calor en el cuerpo. Al elevar ligeramente la temperatura corporal, estos productos ayudan a quemar más calorías, incluso en reposo.

Generalmente, los termogénicos se utilizan como apoyo en programas de pérdida de peso o definición muscular. Su fórmula puede incluir ingredientes como cafeína, té verde, guaraná, pimienta de cayena, extracto de café verde y L-carnitina, entre otros. Muchos de estos compuestos tienen propiedades estimulantes y también ayudan a mejorar la energía y el enfoque mental.

Tipos de termogénicos

Existen diferentes tipos de termogénicos según su composición y mecanismo de acción. Estos son los más comunes:

  1. Termogénicos estimulantes
    Contienen ingredientes como cafeína, sinefrina o yohimbina. Estimulan el sistema nervioso central, incrementan la energía y promueven la quema de grasa. Son los más efectivos, pero también los que más efectos secundarios pueden generar en personas sensibles.

  2. Termogénicos no estimulantes
    No contienen cafeína ni compuestos que afecten directamente al sistema nervioso. Utilizan ingredientes como extracto de té verde sin cafeína, CLA (ácido linoleico conjugado) o L-carnitina. Son ideales para personas con sensibilidad a los estimulantes.

  3. Termogénicos naturales
    Derivan exclusivamente de fuentes naturales como jengibre, cúrcuma, pimienta negra, canela o vinagre de manzana. Aunque suelen tener un efecto más suave, pueden ser útiles como complemento a una dieta saludable.

  4. Termogénicos tópicos
    Se aplican directamente sobre la piel en zonas específicas (abdomen, muslos, brazos) en forma de cremas o geles. Prometen mejorar la circulación y la quema de grasa localizada, aunque su efectividad científica es limitada.

  5. Termogénicos combinados o multifuncionales
    Mezclan varios ingredientes activos, tanto estimulantes como no estimulantes, para atacar la grasa corporal desde diferentes frentes: aumento del metabolismo, control del apetito, mejora del enfoque y reducción de la fatiga.

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